Bajo el imponente escenario del Hotel Westin Palace y durante la gran feria organizada por Verema en Madrid, tuvimos la ocasión y la oportunidad de acudir a una de las grandes catas del día, Protos y sus diferentes variedades, pasando por sus verdejos de Rueda, el Reserva y Gran Reserva de Ribera y el selección especial, El Grajo Viejo. Pero nos tenían preparados una sorpresa, la presentación de una de sus joyas en exclusiva, Protos 27, que vera la luz en marzo de 2017. Perfecta organización y espectacular cata de esta gran bodega de Ribera del Duero.
Protos data sus orígenes de 1927, cuando 11 viticultores decidieron aunar fuerzas y dar lugar a la «Sociedad Cooperativa de Peñafiel», que se acabo transformando en bodega en 1995, siendo la primera de la zona de Ribera del Duero. En 2006 paso también a formar parte de Rueda, con la elaboración de verdejo y comenzó a construir lo que sería su segunda bodega en La Seca. Y en 2010, tras seis años de obras, inauguro la que es su sede principal bajo las faldas del castillo de Peñafiel: una impresionante bodega con una superficie de 19.450 m2 con una capacidad de almacenaje de 3,5 MM de botellas y 5.000 barricas. En la actualidad Protos es uno de los referentes de la región y exporta a más de 91 países en el mundo.
Comenzamos la cata con los vinos de la zona Rueda, siendo el Protos Verdejo 2015 el primero de ellos. Criado sobre sus propias lías durante 3 meses y procedente de cepas de aproximadamente 15 años, a la vista es el típico verdejo, con su color amarillo pajizo y tono verdoso. En nariz, la fruta de hueso nos invade (pera, manzana, melocotón) y en boca es muy fresco y afrutado, cierto amargor y algo de sequedad, presenta una buena estructura y gran acidez.
Seguimos en Rueda con Protos Verdejo Fermentado en Barrica. Procedente de cepas de 25 años, la vendimia es nocturna y manual con posterior selección en la bodega. Tras la maceración se procede a la fermentación y crianza en barricas de roble Francés nueva de 6 meses y un año en botella. Intenso en nariz, destaca su amplitud aromática y frutal que tiene su continuación en boca, manteniendo la frescura, con buena estructura e integración de la madera, si bien todavía puede evolucionar algo más en botella, con un final largo con toques ahumados.
Saltamos a los vinos de Ribera y comenzamos con Protos 27, el vino que catamos en exclusiva y madre mía, que sorpresón. Recién embotellado, el vino es resultado de una cuidada selección de levaduras autóctonas, con una posterior selección por aromas. Tras una crianza de 16 meses en barrica de roble Francés, permanece otro año en botella. A la vista destaca su color rojo picota muy limpio y brillante (como si no hubiera tenido paso por barrica), pero en nariz es una auténtico espectáculo, donde la fruta y la madera realizan la pareja perfecta con una integración aromática digna de elogiar. Pero toda ese espectáculo de aromas no se traslada a la boca, donde el vino todavía necesita tiempo para redondearse. Protos 27 tiene un gran potencial y mucho recorrido por delante y esperaremos ansiosos a marzo de 2017, fecha oficial de su salida al mercado.
Protos Reserva 2011 es un monovarietal tempranillo que procede de cepas de más de 50 años, con una crianza 18 meses en barricas de roble Francés y Americano y otros 18 meses en botella. Intenso, expresivo, sutil, destaca la fruta negra, madura, en licor combinando perfectamente con los toques tostados, especiados. Buena estructura y gran acidez con un final muy muy largo.
Pasamos a su hermano mayor, Protos Gran Reserva 2010. Procedente de cepas de más de 60 años, permanece 24 meses en barricas de roble Francés y Americano y otros 36 meses en botella. Es un vino mucho más complejo e intenso, donde destaca la madera, los tostados, fruta sazonada, cacao, chocolate, tabaco y regaliz, con una entrada cálida, carnoso, potente, buena estructura y acidez y muy largo.
Y terminamos con el vino selección de la bodega, Finca El Grajo Viejo 2012, procedente de la finca con las cepas más viejas, de más de 70 años. Elaborado únicamente en añadas excelentes, la vendimia se realiza de forma manual con posterior selección en la bodega. Posteriormente, la maceración se lleva a cabo con hollejos, fermentando en barricas francesas de 500 litros y posterior maloláctica en barricas, también francesas, de 225 litros, para finalizar con una crianza en barricas de roble Francés nuevo durante 18 meses. En nariz es un vino intenso, complejo, donde la fruta madura viene acompañada de toques minerales, balsámicos y especias. Pero en boca es muy goloso y sabroso, expresivo, resultado de una explosión de frutas y sabores en boca, con un paso amable y serio y un final largo, al igual que los reservas y gran reserva. Todo un vinazo.
Y de esta forma terminamos esta grandísima cata de Protos organizada por Verema en Madrid, donde destacamos la gran incursión de la bodega en Rueda, el sorpresivo Protos 27, el gran nivel de los reservas y el vinazo procedente de sus cepas más viejas, El Grajo Viejo.