Directamente del sur del Ródano nos encontramos este grandísimo vino ecológico, destacando aromas a fruta negra y tostados, amplio en boca, con un paso suave, ligero, muy agradable pero con personalidad.
Domaine Gramenon comenzo su andadura a finales de 1978 cuando Philippe y Michele emprendieron un viaje juntos en la elaboración de vinos en la zona noroeste del sur del Ródano, trabajando con cepas viejas en 12 hectáreas de terreno. Tras un trágico accidente, Michele quedo al frente de la bodega junto a sus tres hijos pero en vez de amilanarse, junto con su hijo Maxime François, dieron un paso al frente, empleando prácticas orgánicas y biodinámicas en los viñedos y convertiendo a la bodega en uno de los estandartes de la región. No sólo se dedican a la agricultura ecológica, sino que ellos mismos cultivan sus propios alimentos y crian a sus animales.
La Sagesse procede de la parcela situada en Gramenon, en Montbrison, un terreno arcilloso, arenoso, con piedra caliza. Elaborado en su mayor parte Garnacha, proviene de cepas de más de 50 años y tiene un paso por barrica de 12 meses.
A la vista destaca el rojo cereza de forma muy brillante, limpio. Nada más acercarlo a la nariz, aparecen aromas a caliza, terroir, tostados y fruta negra muy madura. Tras una primera agitación, los tostados hacen su aparición con la fruta negra de fondo.
En boca la entrada es suave y equilibrada, con un paso muy agradable sin aristas y largo postgusto, armonizando bien la fruta con la madera. Es una garnacha muy bien cuidada y que exprime al máximo todo su potencial. El vino en esta ocasión lo tomamos sólo pero maridaría perfectamente con un cordero asado, pastas con carne, o con un queso camembert o brie.
En conclusión, estamos ante un vino muy bien trabajado, totalmente ecológico, donde destaca la fruta negra y los tostados, que a pesar de su paso por barrica en boca es amplio, pero muy ligero y goloso, lo que invita a beber. Y por sí solo es protagonista, no necesita de ningún acompañamiento pudiendo beberse sólo perfectamente.